En la época estival en la que nos encontramos posiblemente muchos de nosotros cogemos vacaciones y realizamos alguna escapada para desconectar. El hecho de cambiar de aires y dejar a un lado nuestras rutinas nos ayudan a recargar pilas para el resto del año por eso es importante aprovechar las vacaciones para realizar actividades placenteras y descansar. Pero no siempre conseguimos esa deseada desconexión.
Además de reducir casi hasta la extinción el contacto con nuestro trabajo, por ejemplo destinando una hora al día para leer los mail, es importante programar alguna actividad gratificante para cada día y compaginarlo con periodos de descanso. Todo esto hace que nuestra mente y nuestro cuerpo se recuperen pero además podemos ayudar de manera activa a esa recuperación del equilibrio mente-cuerpo y salud.
A continuación encontrarás una técnica de relajación que puede ayudarte a relajar tu mente y tu cuerpo. Con esta técnica tomamos conciencia del ahora para realmente desconectar estando de vacaciones.
Se llama Respiración Condicionada de Benson y consiste en los siguientes pasos:
- Elegir un lugar tranquilo para practicar, sin interrupciones, luz tenue, ropas cómodas, postura sentado o tumbado boca arriba, con los ojos cerrados para favorecer la concentración.
- Es importante no dormirse, sino concentrarse en las sensaciones que estamos generando, así como el recorrido mental por todo nuestro cuerpo, tratando de visualizar cada una de las partes que recorremos.
- Se elige una palabra, que nos transmita serenidad,…una palabra no muy larga, puede ser relax, paz…cada uno deberá elegir su palabra, de forma que al finalizar el entrenamiento, dicha palabra nos genera tranquilidad en cualquier momento, en cualquier situación.
- Comenzaremos a realizar varias inspiraciones profundas sin forzar el ritmo respiratorio, y echaremos el aire por la boca pausadamente, de tal manera que el ritmo respiratorio sea lento, pausado y esto nos provoque un rápido estado de relajación.
- A continuación haremos un recorrido mental por todo nuestro cuerpo, empezando por las extremidades inferiores y finalizando en nuestra cabeza. Trataremos de imaginar, visualizar, cada una de las partes y sentir cómo están relajadas, incluso llegando a notar el peso del cuerpo y cómo este influye en el estado profundo de relajación.
- Una vez que hemos finalizado el recorrido, ahora estando más relajados, haremos varias inspiraciones profundas, como al principio, pero al echar el aire, nos diremos para nosotros la palabra que hemos elegido. Esto lo haremos un mínimo de 5 veces.
- Para finalizar, vamos a atender a la sensación de relajación y mentalmente contaremos de 5 a 0, poco a poco iremos abriendo los ojos, y moviendo las extremidades, para volver lentamente a la situación de la que partíamos.
RECOMENDACIONES:
Practicar 2 veces al día, primero tumbado, una vez que consigamos la respuesta de relajación, cambiaremos de postura a sentado, y después ya con los ojos abiertos iremos cambiando a diferentes posturas: de pie, andando, para así generalizar la respuesta de relajación a las situaciones de la vida cotidiana.