Adelgazar a veces es muy complicado, ¿quieres saber por qué?
Muchas personas hacen dieta pero no consiguen perder un solo gramo, ¿qué es lo que está fallando?. Es un problema que hay que resolver cuanto antes, ya que la frustración puede hacer que disminuya la motivación para seguir un estilo de vida saludable.
Alguna vez, muchas personas se han hecho esa pregunta, ¿por qué, aun habiendo mejorado mi alimentación, no consigo adelgazar?. Muchas personas que intentan adelgazar, no saben cuáles son los factores cruciales que influyen a la hora de perder peso, y es posible que, aun haciendo un gran esfuerzo por mejorar la alimentación, no consigan bajar de peso a la velocidad esperada.
¿Cuáles son las causas más frecuentes de la inefectividad de las dietas?
Tu dieta no funciona porque habías bajado con anterioridad la ingesta de calorías.
Es muy habitual encontrar pacientes que toman suplementos (medicinas) para adelgazar, para disminuir su apetito o la absorción de determinados nutrientes y pasan varios días ayunando. Ayunar o hacer dietas muy hipocalóricas engorda muchísimo. Al principio, parece que estás adelgazando, pero en realidad, sólo estás perdiendo masa muscular. Además tu organismo, al pasar hambre, se pone en modo ahorro, e intenta guardar el máximo de grasa posible para cuando le toque pasar hambre.
Recomendación: en vez de hacer dietas de comer poco, es mejor descubrir cómo acelerar tu metabolismo para bajar de peso, como por ejemplo incrementado la actividad física.
Tu dieta no funciona porque no duermes lo suficiente.
Es muy común que después de una mala noche, se tenga mucho más apetito. Además el día siguiente, aumentan las preferencias por alimentos poco saludables y sobre todo con sabores dulces. No dormir bien, es aún más importante para bajar de peso que la dieta en sí, y no solo dormir, sino que hay que dormir profundamente. Cuando no dormimos adecuadamente aumentan en el organismo los niveles de una hormona llamada ghrelina que reduce el ritmo metabólico y se queman las grasas más despacio. Si duermes al lado de un roncador que te impide dormir profundamente, ese puede ser el motivo por el que tu dieta no está funcionando.
Recomendación: evaluar cuál es la causa por la que no duermes profundamente, incomodidad, estrés o alguna enfermedad, y consultar con un profesional en caso de ser necesario. Puedes tomar infusiones relajantes o pastillas de pasiflora para ayudarte a conciliar el sueño.
Tu dieta no funciona, porque comes demasiados carbohidratos
Quizá no sepas diferenciarlos adecuadamente. Los Carbohidratos (harinas, cereales, galletas, frutas, golosinas y azúcar) empeoran la función de la hormona insulina y pueden hacer que padezcas insulinorresistencia si los ingieres en grandes cantidades.
Recomendación: No hace falta eliminarlos totalmente de la dieta, pero hay que ingerirlos de manera moderada y en las primeras horas del día. A partir de las seis de la tarde, evita tomar carbohidratos y verás como tu dieta empieza a funcionar.
Tu dieta no funciona, porque tienes carencia de vitamina D y calcio.
Es muy importante, pero poco conocida el papel que juegan el calcio y la vitamina D a la hora de perder peso. La vitamina D es la que ayuda a fijar el calcio a los huesos, y cuando hay un déficit de calcio, algunas células de grasa entienden que deben almacenar toda la comida posible y empiezan a crecer de forma imparable. Es muy llamativo cómo la deficiencia del calcio y vitamina D puede ser frecuentemente la causa de que algunas personas no bajen de peso aun habiendo mejorado su dieta.
Recomendación: Intenta consumir cuantos más lácteos mejor, pero también es importante que salgas a que te de el sol, ya sin él no se sintetiza vitamina D que es la que hace que las células puedan asimilar el calcio que tomamos con los alimentos.
Tu dieta no funciona porque tienes problemas de tiroides.
Es posible que la pérdida de peso esté ralentizada por déficit de producción en las hormonas tiroideas. Algunas personas pueden engordar entra 4 y 5 kgs por tener hipotiroidismo. Es muy importante conocer los síntomas del hipotiroidismo: sensación extrema de frío, piel reseca, pulso lento, cabello seco, somnolencia y cansancio. También se puede sentir depresión y dolores musculares.
Recomendación: si sientes alguno de estos síntomas, lo mejor es acudir al médico para que te haga un análisis de sangre en el que se vean los niveles de hormonas tiroideas. En caso de padecerlo, el médico te prescribirá terapia hormonal sustitutiva y se resuelve con facilidad.
Tu dieta no funciona porque tienes más de 60 años.
Al llegar a los 60, la capacidad del organismo para quemar calorías es menor por distintas razones. La producción de hormona del crecimiento que normalmente se produce al dormir profundamente o hacer ejercicio, disminuye a partir de los 30 años y al llegar a los 60 desaparece totalmente. Esta hormona, es capaz de fabricar músculo a partir de los alimentos que ingerimos, pero su ausencia hace que la comida se transforme en grasa con mayor facilidad. Además a estas edades, muchas veces se toman medicinas que no ayudan a bajar de peso precisamente.
Recomendación: consultar a nuestro médico para intentar que nos recete otras medicinas que no nos hagan engordar y encontrar apoyo para hacer ejercicios.
Tu dieta no funciona porque estás tomando medicinas que te impiden bajar de peso.
Hay personas que aun haciendo muchos sacrificios para bajar de peso, no lo consiguen debido a que toman medicamentos que se lo impiden. Muchas veces, sustituyendo ese medicamento que nos hace engordar por otro similar, se consigue bajar de peso sin casi esfuerzo.
Recomendación: pedirle a nuestro médico que nos cambie la medicación por otra similar que no nos impida perder peso.
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